MARKET VISION - REVISTA 248

MARKET VISION - REVISTA / 248 - III - 2021 adentrarse en la venta directa por internet han descu- bierto que era posible, y se han acostumbrado . Y ahora piensan que podrían hacer más por sí mismos. Y nos referimos a pymes, puesto que los grandes hace mucho que tienen la capacidad de hacerlo: en su caso todo depende de la voluntad, que a su vez depende de hacia dónde se incline el fiel en la balanza de pros y contras. R ecapitulemos: del mismo modo que la pandemia hizo a muchos consumidores no adictos a la red descubrir que existía el comercio online, los market- places han hecho que las marcas descubrieran que pueden hacer mucho más por sí mismas. Otra cosa es que vean si les conviene hacerlo. Hoy en día son numerosas las marcas de electro- domésticos que en su página web , además de infor- mar sobre la empresa y su catálogo, incluyen una sec- ción de «Tienda», que facilita la compra directa al productor. No es ningún secreto, ustedes lo saben so- bradamente. Lo que sí que debe constatarse es que, no hace tan- tos años, la noticia de que una marca iba a vender directamente online despertaba todo un conato de rebelión de los comerciantes «clásicos». Amenaza que cada vez tiene menos sentido, pues cada día que pasa se hace más palmario que apenas supondría «po- ner puertas al campo». Un ejemplo muy notable fue el de la filial de la an- tigua Fagor en Francia. Estamos hablando de cuan- do Fagor era una cooperativa guipuzcoana, por aque- lla época dueña también de la francesa Brandt. Nada que ver, por tanto, con la Fagor ni con la Brandt actuales . En Francia el grupo vasco resucitó la marca Thomson (entonces durmiente) para línea blanca, con el fin de venderla exclusivamente por internet y de forma directa . La experiencia duró diez meses . El comercio detallista (los Darty, Boulanger, todas esas

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